Empoderando al Personal que trabaja sin escritorio

Parece imposible que el 80% de la fuerza laboral del mundo (2,7mil millones de personas) hayan sido olvidadas por la tecnología pero es verdad. Estas son personas detrás de escena, que trabajan en líneas de producción, entregando productos, atendiendo clientes y ocupándose de pacientes. La pandemia demostró que estas personas son esenciales para la economía, y sin embargo la tecnología se desarrolla predominantemente para las personas que están frente un escritorio. Es hora de que la tecnología se ocupe de todas estas personas que apoyan a la sociedad.

¿Es esto algo del momento o es un movimiento?

Cuando las empresas debieron adaptarse a modelos híbridos y remotos, rápidamente adoptaron tecnología como Microsoft Teams y Zoom. Muchos se sorprendieron como el personal de oficina se adaptó eficientemente a este nuevo paradigma de comunicación, pero sin embargo muchos trabajadores (operarios) quedaron fuera de este arreglo. La realidad es que solo el 1% del gasto en software empresarial se focaliza en tecnología para personal sin escritorios. En otras palabras, la mayoría de la población trabajadora fue totalmente ignorada.

El impacto de esta exclusión se hizo evidente en los estudios que revelan que solo el 56% de los trabajadores sin oficina en los Estados Unidos se sienten conectados e involucrados con sus empleadores. No sorprende que la insatisfacción de este grupo resulta en una alta rotación y constante movimiento. Conforme al Índice de Tendencia de Trabajo de Microsoft, el 40% de personas en 31 países indicaron que están considerando dejar su trabajo este año. Hay una sensación cada vez mayor que las formas tradicionales de trabajar se están acabando y que las nuevas normas requieren un empoderamiento digital.

Brindar servicios digitales al personal sin escritorio

Existen tres maneras en que las organizaciones pueden ocuparse de la fuerza laboral sin escritorio:

1. Darles acceso a la información. La mayoría del tiempo estos individuos se encuentran en el piso de planta, cuidando a pacientes o en el campo y deben tomar decisiones en el momento. Frecuentemente no cuentan con acceso a los sistemas empresariales que las organizaciones usan para conectarse y comunicarse. Esto destaca la necesidad que tienen de ver datos relevantes desde sus dispositivos móviles que los ayude a tomar mejores decisiones considerando datos y no solo su intuición. Por sobre todo, esta información debe estar accesible durante el flujo de su trabajo para evitar disrupciones y mantener la productividad. Es una sorpresa saber que el 84% de los trabajadores sin escritorio afirman que no reciben suficiente comunicación directa de sus superiores. La comunicación consistente es clave. El uso de encuestas y brindar oportunidades de carrera dentro de la organización también ayuda a que el personal se sienta reconocido y apreciado.

1. Automatizar, aumentar, y aliviar. Puede sonar poco razonable que se deben automatizar las tareas de las personas para mejorar su vida laboral, pero es totalmente cierto. Cuanto más se pueda aumentar la toma de decisiones (ocupándonos de las personas), será mayor lo que alivia la carga de las tareas transaccionales. Por ejemplo, a los gerentes se les pide constantemente que aprueben vacaciones, que se ocupen de temas de horarios, que recuerden al personal de las capacitaciones necesarias y muchas otras tareas administrativas que la tecnología puede hacer por ellos. Josh Bersin, analista de la industria lo resume perfectamente, “el mayor cambio es pasar de tecnología de RRHH a tecnología de trabajo. Esto significa que todo lo que hacemos en cuanto a la tecnología debe ser en herramientas útiles e importantes para hacer el trabajo”.

1. Brindarles control. A un gran porcentaje de la fuerza laboral sin escritorio se les pide que trabajen con una carga horaria diferente al clásico régimen de 09 a 18 hrs, Esto significa que las semanas esporádicas son difíciles de planificar. Esto aumenta durante épocas disruptivas como la crisis COVID 19, donde instituciones y colegios cerraron sus puertas, dejando a los padres luchando para lograr el cuidado de los niños. Las herramientas digitales que les permite acceder a la programación y la capacidad de modificarla cuando la ocurren hechos, impacta positivamente en la satisfacción y compromiso del empleado.

“Nunca desaproveches una buena crisis”

La famosa frase de Winston Churchill de hace varias décadas, sigue hoy tan vigente como siempre. En este momento, el mundo corporativo se está abriendo y será maleable para el futuro previsible. Las organizaciones que reconozcan las necesidades de los trabajadores sin escritorio deben invertir en nuevas herramientas digitales para que estos sean más exitosos. Poder empoderar e involucrar a los empleados resultará crítico para que las empresas y los gobiernos se adapten al nuevo mundo laboral.